Este fin de semana me llegaba el siguiente artículo de la web de Telecinco. “Jetagramers, guerra a los Influencers jetas”
El artículo menciona el término “Jetagramers”, acuñado por Adelf Morales, gerente del restaurante Topik de Barcelona. Se refiere a aquellos influencers que se aprovechan de los negocios sin ofrecer una compensación adecuada y sin cumplir con las obligaciones fiscales. Según el artículo, hay negocios que denuncian estafas por parte de estos influencers y el Ministerio de Economía está trabajando en un registro en el que deberán inscribirse.
El artículo también destaca que Hacienda ha advertido a los influencers que están empezando que deben tributar y cumplir con sus obligaciones fiscales, incluso antes de comenzar a recibir ingresos. Menciona el caso de Marina Martínez, dueña de Todopink, quien recibió mensajes de una influencer que quería promocionar su marca a cambio de productos gratuitos. Sin embargo, Marina comenzó a recibir mensajes de otras influencers pidiendo artículos sin generar clientes reales, lo que lleva a sospechar que algunas influencers están engañando a los negocios para obtener productos gratis e incluso revenderlos en sus propias redes sociales.
El artículo plantea la preocupación de los negocios frente a esta situación y la necesidad de establecer regulaciones y medidas para evitar abusos por parte de los influencers que actúan de manera deshonesta. Se resalta el respeto hacia aquellos influencers que cumplen con contratos y obligaciones fiscales, pero se critica a aquellos que se aprovechan de los negocios sin ofrecer una contraprestación justa.
En resumen, el artículo de Telecinco destaca el fenómeno de los “Jetagramers” y la preocupación de los negocios ante posibles estafas y abusos por parte de influencers que buscan obtener productos gratuitos sin generar beneficios reales para las marcas. Se enfatiza la necesidad de regulaciones y medidas para combatir estas prácticas deshonestas.