SALUD MENTAL EN INFLUENCERS

SALUD MENTAL EN INFLUENCERS

  • Categoría de la entrada:Influencers
  • Autor de la entrada:
  • Tiempo de lectura:6 minutos de lectura
Aludimos muchas veces a la vida de los Influencers como idílica. Se declara que casi no trabajan, que son unos vividores y que no deberían quejarse de nada. Sin embargo, como todos los estereotipos, las cosas no son así. Los influencers por la morfología de su profesión, tienen una serie de contras que les afectan en su vida.

El mayor problema al que se expone un Influencer es la salud mental. Es el punto débil de cualquier profesional o creador de contenido. A continuación vamos a describir las causas que pueden derivar en ese deterioramiento. 

24/7 conectado. Sin vacaciones

Normalmente, un influencer no puede permitirse un mes sin trabajar, como las vacaciones que tienen la mayoría de trabajadores. En ese tiempo no ingresaría, como muchos otros autónomos, pero a su vez, las redes sociales suelen castigar bastante fuerte esos “descansos”. Además, la mayoría de influencers tienen miedo a siquiera hacerlo, por el temor y la dependencia a estas redes.

Exposición constante

Los Influencers, sin importar mucho lo que pase en su vida privada, han de estar siempre “ready”. Es decir, se les tiene que ver contentos, felices y positivos, y eso es lo que han de mostrar en sus redes. Siendo muy duro en determinados momentos, ya que toda persona tiene altibajos.

Soledad

Muchas horas sólo con el móvil. Por la morfología del trabajo, un influencer pasa horas delante de una pequeña pantalla, lo que todos sabemos que mentalmente es bastante duro para nuestra salud (vista, sedentarismo…) Por ello pasa menos tiempo del que querría, o debería, en compañía de sus amigos o familiares.

Siempre perfecto

Al pasarte todo el día grabándote y haciéndote fotos, has de siempre estar “estéticamente bien”. No hay días para ir despeinado, tener ojeras o estar en pijama, lo que añade un plus de presión en el día a día.

Presión de los números y Algoritmos

Estar todo el día pendiente de los “likes”, seguidores y números en general de las redes sociales puede resultar muy perjudicial. Los ingresos y tu carrera profesional depende de eso y al estar controlado por un “ente externo” y tener tan poca información sobre ellos, puede resultar frustrante.

Bullying y ciber acoso

Las redes sociales se han convertido en lugares sin ningún tipo de control ante el bullying y el ciberacoso. Los Influencers pueden recibir todo tipo de mensajes y comentarios negativos cada día, con lo que resistir esto se antoja muchas veces difícil.

Cancelación

Las redes sociales no perdona. El temor a equivocarte o decir algo inapropiado o que pueda ofender a un colectivo siempre está presente. Esto, que puede ser el fin de tu carrera o la cancelación de contratos con marcas, mantienen al Influencer constantemente en tensión y le dificulta mucho ser natural. Es sencillamente una presión añadida más.

Inseguridad 

Pueden saber donde vives y te mueves, con quien, conocer a tu familia, amigos, hijos, pareja. Esta sobreexposición puede dar la sensación de inseguridad. Esta se suele además acrecentar porque muchos de los creadores han sufrido algún tipo de acoso o “susto” con lo que la sensación de inseguridad es constante.

Poco profesionalizado

Muchas de las colaboraciones son sin contrato, no está bien regularizado, te sientes desprotegido… Esta inseguridad laboral afecta. Es tu principal fuente de ingresos y estar todo tampoco legislado solo hace que añadir presión al día a día.

Toxicidad de redes sociales

Está demostrado que las redes sociales por su diseño y utilización son tóxicas para cualquier ser humano, sobre todo si no sé les da un buen uso. Esto solo hace que acrecentar más las posibilidades de que esto le pase a una persona que pasa horas y horas delante de ellas.

Inseguridades

Verte y escucharte constantemente en video, o mientras te grabas, hacerte miles de fotos, estar editándote durante horas… Esa sobreexposición a ti mismo puede aumentar tus inseguridades estéticas, físicas. Nadie esta preparado para pasarse el día viéndose y oyéndose, es como si nos pusieran durante horas delante de un espejo.



Compartir en: